En una Jornada que se esperaba mucho, se tenía mucha expectativa por los choques que se daban. El Barcelona visitaba al Lyon y el Bayern Munich al Liverpool, en los papeles era una tarde de muy buen fútbol que terminó defraudando por la ausencia del gol.
El Barcelona se presentó en Lyon con la idea de no repetir la imagen de Roma. Y quedó patente que eso no iba a ocurrir a los 23 segundos cuando Dembélé pudo adelantar al Barcelona con un tiro cruzado tras un pase de Busquets. Ni un minuto de juego y los de Valverde ya habían creado más peligro que en los 90 minutos en el Olímpico romano.
25 tiros al arco tuvo el equipo Culé, crearon peligro pero no concretaron con Luis Suárez haciendo de Higuain, era imposible marcarle al buen Lyon que mantiene la eliminatoria viva para el encuentro de vuelta. Luis Suárez con el partido de hoy cumple 4 años sin marcar fuera de casa por la Champions.
En el otro partido disputado en Anfield, el Bayern Munich salió ileso de su visita, con un James muy obrero defendiendo y corriendo 11 kilómetros. Mientras Salah, la estrella del Liverpool no apareció y Anfield se quedó sin ver goles.
En ningún momento se vio un Bayern que quiso imponerse en Liverpool y tampoco se vio un Liverpool que quisiera comerse la meta de Neuer. El empate lo deja todo para la vuelta y la victoria fue, sobre todo, del tedio.
Una tarde de Champions que fue muy gris, debemos hacer un minuto de silencio para aquellos que dejaron de trabajar, se escaparon de clase y apagaron la play para ver unos partidos de Champions tediosos y sin goles. Esperemos, recemos para que los partidos de vuelta no tenga la misma tónica.