El Tottenham dirigido por José Mourinho venció 2-0 al Manchester City de Guardiola, segundo clasificado en la Premier League, rompiendo todo los sueños de una posible remontada de los citizens, ya son 22 puntos que distancia al City del Liverpool y quedan solo 39 puntos en juego. Los Spurs han sentenciado la Premier el día de hoy.
El vigesimotercer clásico entre Mourinho y Guardiola estuvo light en la rueda de prensa previa, pero no en el campo, todo lo contrario a ediciones pasadas. Pero emociones no faltaron: El VAR perdonó una roja a Sterling en el 13′ por un planchazo sobre Alli, Gündogan falló un penalti en el 40′ que bien pudo derivar en una nueva pena máxima o otra roja para Sterling, Zinchenko se marchó expulsado en el 60′ y Aguero… Bueno Aguero mantuvo el juego interesante.
El partido empezó como era obvio el Tottenham queriendo contragolpear y el City con la posesión pero, a diferencia de otras ocasiones, trataron de ser más verticales. Sin embargo eso no se tradujo en muchas ocasiones claras de gol. O si… La tuvo Aguero y la pego en el palo a los 27, al 38 llego el penal que tapó Lloris, a los 40´ Gündogan que ya había fallado el penal disparó arriba a puerta vacía.
El primer tiempo fue del City y termino 0-0, el segundo tiempo fue del Tottenham. La expulsión por doble amarilla de Zinchenko en el 60′ cambió el partido. En el 63′, sólo tres minutos después, Bergwijn anotó el 1-0 para poner la guinda a un debut de ensueño. El ex del PSV recibió de Lucas Moura en la frontal y batió a Ederson con un remate acrobático.
La sentencia llegó en el 71′ a cargo de Son. Ndombélé condujo y habilitó al coreano que marcó con algo de suerte: su disparo lo tocó lo justo Fernandinho para engañar a Ederson. 2-0 y del City no se supo más en todo el partido.