Porque está generación de croatas no es más que exitosa.
Son muchos los casos de selecciones que no logran compaginar sus piezas, a pesar de que estas sean destacadas en sus clubes. Por suerte, aquí no es así.
Croacia ha logrado engranar jugadores y mostrar un alto nivel en cancha.
Igual de alto que el nivel de sus convocados, sí.
Dominio, goles, dinámica, asociaciones, automatismos y seguridad son algunas de las características que se le han visto a la selección de Zlatko Dalić.
Si no me creen, pueden preguntarle a Argentina.
3-0 y un golpe de autoridad. Todo muy bonito, pero…
¿Cuál es la receta del fútbol croata?
Nuevos roles, nuevos resultados
Esta es la misma generación que participó en la Eurocopa 2016, pero el estilo de juego es completamente diferente. Ahora es más vistoso y, lo primordial, más efectivo.
Y no, no solo se trata de la llegada de Dalić al banquillo. Aunque si influye.
La receta del éxito no ha sido más que los nuevos roles de Ivan Rakitic y Luka Modric; las dos caras de la selección, pero ahora en una posición más estratégica.
Gracias, Barcelona. Gracias, Real Madrid.
La llegada de los brasileños Paulinho y Coutinho al Barça, hizo que Rakitic tuviese que adoptar nuevos roles para sobrevivir.
Esta temporada se vio más retrasado y, por ende, más defensivo. Paulinho no es más técnico que él, pero ofrece más llegada. Y como todo lo hace Messi…
Asimismo, Zidane probó lo contrario con Modric.
En varias ocasiones el croata jugó como volante “10”, tal como indica su camiseta.
Más allá de una salida estupenda, para mí de las mejores en el mundo, la visión e inteligencia de Luka puede tener una cabida estupenda justo por detrás de los delanteros.
Croacia, tal como una esponja, absorbió ambos planteamientos e ideó su propio esquema.
Aunque parece imposible juntar ambos jugadores con Kovacic (el sueño de los croatas), se encontró un equilibrio en el medio del campo.
Esto ya no es un Lampard – Gerrard forzado… A pesar de que en este caso también aparece un emergente como Brozovic.
Lo vital es que…
Uno sigue siendo motor, cerebro y capitán, pero con libertad.
¿Y quien detiene a un hombre libre?