El proyecto más importante del fútbol venezolano llega a uno de los clubes más importantes de América y el mundo. Aquí te contamos todos los detalles de este interesante (e histórico) movimiento.
Jan Hurtado tiene 19 años. Es delantero. Se formó en la cantera del Deportivo Táchira (Venezuela), luego jugó una temporada en Gimnasia y Esgrima La Plata y ahora llega a Boca Juniors, siendo el primer venezolano en el equipo profesional de dicha institución.
Pese a que su contratación se perfila a un rendimiento a futuro, probablemente seguido de una gran venta, el presente de Jan podría encontrar cabida en el sistema de Alfaro.
¿Qué ofrece Jan Hurtado?
Para saber qué puede aportar el delantero, es necesario saber qué buscará el técnico mediante su propuesta/idea de juego. Y en Boca, ahora mismo, todo es una incertidumbre.
Sin embargo, parece estar claro que el club juega con un “9” y no dos. Allí, Hurtado tendría por delante a Benedetto (que podría marcharse al Marsella) y Wanchope, con quien podría competir directamente.
Es decir, siempre que Benedetto salga en este mercado, el venezolano puede aspirar a la titularidad incluso.
Y encuentra méritos en lo que es como jugador: un delantero que nace de la potencia; conduce, posee buena pegada y tiende a ganar los duelos individuales a base de fuerza. Además, maneja gran técnica.
Jan ofrece criterios interesantes para el juego directo, con el que se encuentra en la Vinotinto y puede aprovechar en las rápidas transiciones de Boca:
- Capacidad para jugar fuera del área y participar en la dinámica del equipo.
- Buen juego de espaldas al arco; hábil para girarse y descargar a las bandas.
- Buena relación con el gol. Sabe atacar espacios y posee remate de media/larga distancia.
Todo, como es obvio, con el margen de mejora y proyección que es notable en cualquier joven de 19 años, a excepción de Mbappé.
El verdadero triunfo, sin embargo, estará en la progresión del jugador. Y es prudente resaltar que la relación “progresión-Boca” no suele dar buenos resultados.
Puede ver minutos, titularidades… O no. Pero deberá aprender, de todo y cada cosa.
Porque, al final del día, son solo segundos menos para verlo en Europa.