James se dio el lujo de rechazar las ofertas que tuvo de la Premier en julio y agosto de 2019. El colombiano no contemplaba en aquel momento ir al fútbol inglés. Sus preferencias eran claras: España o Italia. Hubo tres equipos que se interesaron por él al principio. Fueron la Juventus, con una llamada de Cristiano Ronaldo incluída, el Napoli de Ancelotti que el técnico italiano ha demostrado ser el mayor fan de James fuera de Colombia. Y el Atlético de Madrid, al que estuvo muy cerca de incorporarse, pero Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, se echó para atrás en el último momento.
En la Premier, el interés del Arsenal no es nuevo. También pujaron por James en 2019, pero el colombiano dio orden a Jorge Mendes, su agente, de buscar otras opciones, ya que la Premier no estaba entre sus preferencias. O sea a James le cuesta hablar español y se lo quieren llevar a Inglaterra donde los bebés tienen que hacer un curso de 5 años para poder decir buenos días con acento británico.
La Juve ni siquiera hizo una oferta, pero tanto el Napoli como el Atlético sí que intentaron hasta el último momento el fichaje del crack colombiano. Ancelotti se lo pidió apasionadamente a Aurelio De Laurentiis, presidente del club, pero éste nunca puso sobre la mesa el dinero que pedía el Real Madrid.
El Napoli lo quería cedido con una opción de compra para 2020. El desencuentro entre el Real Madrid y el Napoli fue total, entre otras cosas por unas declaraciones de De Laurentiis arremetiendo contra Florentino Pérez.
El caso del Atlético fue distinto. Simeone quería a James y el conjunto rojiblanco llegó a poner sobre la mesa una oferta, pero la dura derrota que sufrió el Real Madrid en la pretemporada ante el Atlético, por 3-7, provocó que Florentino decidiera no traspasar a James al máximo rival de la ciudad ante el posible enfado de la afición. Era darle más cuchillas al carnicero que ya te rebano.
James sigue encerrado en el Real Madrid a la espera de que se lesionen todos los centrocampistas del Real Madrid y del Castilla para poder jugar, incluso ha pensado en convertirse en defensa central para volver a patear una pelota.