El Ibiza estuvo a un cuarto de hora de hacer historia en la Copa y eliminar al Barcelona. Lo evitó Griezmann con un doblete terapéutico para Setién. El caso es que los dos primeros partidos de Setién al frente del Barça generan muchas dudas ya que sufrió mucho para ganar al Granada con los titulares y en Ibiza la pasó mal con un once menos habitual, pero de garantías. Mucho toque, mucha posesión, pero sin crear apenas ocasiones a los rivales, el mismo problema de siempre.
El equipo de la segunda división española que tal vez no ascienda porque toda la ciudad se la pasa de fiesta siempre, se mostró como un equipo bien trabajado que estuvo a solo 15 minutos de ser la noticia mundial. Al minuto 9 de partido Javi Lara sirve un balón a la banda izquierda para que Raí centre y Javi Pérez viniendo desde atrás remate a puerta con la fortuna de que el balón roza en Pep Caballé y bate a Neto. Este gol pudo ser histórico pero al modesto Ibiza le sobraron 17 minutos.
El matador de equipos pequeños Antoine Griezmann, que no ha hecho mucho en toda la temporada apareció justo para quitarle la felicidad a la pequeña isla de España. El francés campeón del mundo aprovechó un gran pase filtrado de De Jong para empatar el partido al 73.
El último cuarto de hora fue total del Barça. El 1-1 acabó con las ilusiones del Ibiza y los de Pablo Alfaro recularon de forma peligrosa para sus intereses. El Barcelona se vino encima y solo en tiempo agregado pudo romper el empate. Otro pase filtrado de De Jong otro gol de Griezmann 1-2 silencio total, los aplausos volvieron a la grada, pero ya con el partido finalizado para despedir a los suyos que estuvieron cerca de conseguir la gloria.