Gotham no es tan tóxica si la comparamos con el entorno que rodea a Boca Juniors.
Ahora que renunció Guillermo, todo será igual. El ambiente hostil no es algo que pase con los técnicos, en especial cuando estos han sido ídolos y han dejado trofeos. Simplemente, está en Boca. Es su esencia.
Arkham, los Wayne, Falcone… Gotham siempre tendrá problemas. Boca Juniors también.
Tras la final de Libertadores, inicia una nueva era. El argumento del descenso amenaza con no ser suficiente. Todos los saben. El rendimiento arrollador del club pasa por ser una necesidad.
Aún no sabemos quien puede ser el Batman de esta historia. Pekerman parece un poco oxidado para colocarse el traje. Mientras, los otros actores tienen más perfil de Robin que cualquier otro personaje.
Sampaoli emigró a otra ciudad. Ni el mal pudo detenerlo, comentan.
No obstante, aún cuando el panorama es bastante oscuro, puede aparecer The Dark Knight. Este puede no ser Batman, pero sí alguien que entienda las necesidades de Boca y mantenga, por lo pronto, una buena racha en el club.
Títulos, copas. La Superliga Argentina fue clave con Guillermo, esa es la vara.
Es difícil, sin un héroe en la dirección técnica, conseguir y erradicar a los villanos. Aunque en este caso, todo puede ser un poco diferente.
Quizá el villano sea Alfred, o Daniel Angelici, como otros lo conocen.
Y sí, posiblemente está sea las aventuras de Earth 3, o como a mi me gusta llamarlas, del tercermundismo. Por suerte, cerca del Monumental, lo pude confirmar.
El guasón, por otro lado, no hace mucho daño, solo arrebata Libertadores y luego puede reír. Este, sin dudas, es Marcelo Gallardo. El ser más astuto del mundo.
No podían faltar los ciudadanos de Gotham. No tienen mucha importancia en la historia, hasta que sucede algo y ellos buscan afectar la ciudad a como dé lugar.
¡Qué coincidencia! (…) Aunque no se ofendan, algunos apoyan.
Y, habiendo leído todos los comics, llegó a una conclusión: Gotham no tiene equipo de fútbol.
Porque ese equipo es Boca Juniors, y hace vida en Buenos Aires.