El Atlético de Madrid y el Celta de Vigo compartieron los puntos y sumaron una unidad tras firmar un empate. El ex Real Madrid, Juventus y Chelsea, Álvaro Morata, puso a los colchoneros por delante en el marcador cuando el reloj no marcaba ni siquiera el primer minuto cuando a los 50 segundos de haber iniciado el encuentro, luego de un mal despeje de Iago Aspas, el colombiano Arias robó el balón y con una pared con Marcos Llorente le dio el balón a Angelito Correa quien asistió para que Morata solo tuviera que empujar el balón al fondo de la red.
El Atlético llegó del parón como si nada, sin importar quien juegue siempre son peligrosísimos así juegue Costa (sancionado) o Morata, Correa o Carrasco (enfermo del estómago en casa) o simple rotación entre Trippier y Santi Arias de igual manera todos están a tono para jugar al máximo nivel.
Todo el primer tiempo fueron ataques y contraataques que chocaban contra las defensas rivales en cualquiera de los casos. Y no fue hasta casi el final del primer tiempo cuando Brais intentó amenazar el arco protegido por Oblak con un disparo con rosca que empezó a calentar el encuentro. Los colchoneros llegaban al área de Rubén poco pero siempre con peligro, tanto así que pudo sumar dos goles más antes de acabar el primer tiempo. Primero con un mano a mano de Correa que aniquiló el árbitro pitando una falta a Llorente en lo que en realidad era obstrucción rival. Después, cuando Llorente se juntó de nuevo con Correa para ganar la línea de fondo y pasear el balón por el frente de la línea de cal a los pies de Rubén, pero no hubo rematador.
La segunda mitad comenzó casi calcada de la primera pero con diferentes protagonistas, esta vez el balde de agua fría cayó sobre los dirigidos por Simeone. Beltran sacó el pincel de su bota para inventarse un remate de volea-cuchara que se coló por la esquina de Oblak con suavidad para así colocar el 1-1 definitivo. El punto sumaba a los equipos pero ninguno de los dos equipos lograrían lo que buscan este año, por lo menos aún.