El Barcelona con la incorporación de Boateng al 11 inicial y con Messi mirando el partido desde su casa, cayó en la ida de los cuartos de final ante un correcto Sevilla, que mostró su mejor nivel.
El Barcelona parece tener sus prioridades claras y la copa no es una de ellas, Desde el inicio de la temporada los culés van por la Champions y no quieren repetir el desastre del año pasado contra la Roma, así que Valverde ha tomado muy en serio las rotaciones y los descansos. Sin Messi y con Suárez, Coutinho, Dembélé y Alba desde el banco cedieron una importante ventaja al Sevilla.
El primer gol fue obra de Sarabia al rematar un centro desde la izquierda al minuto 58. Luego de un primer tiempo trabado y con pocas ocasiones. Valverde al verse abajo en el marcador mandó al campo a Suárez y a Coutinho por Malcom que perdonó un gol claro tras un buen pase de Arthur y Boateng que no tuvo mucho que hacer. El partido siguió la misma tónica y Ben Yedder encontró su gol al minuto 78 dandole una importante victoria al Sevilla que hizo respetar el Sánchez Pizjuán.
Pero no todas fueron buenas noticias para los dirigidos por Machín, el partido le dejó dos piezas claves en la camilla, Jesús Navas y Sarabia, rotos en el suelo con el tradicional gesto de la lesión muscular, justo en el momento más importante de la temporada Machín tendrá que encontrarles reemplazo rapido.
Por su parte el Barcelona sigue buscando el nivel de Coutinho, que en sus últimas presentaciones ha estado desaparecido en el campo y está perdiendo minutos y confianza necesaria para mostrar el nivel que dio en el Liverpool. Al mismo tiempo buscan fichar su reemplazo en Ámsterdam y parece que están cerca de conseguirlo.