Fernando Morientes recuerda con dolor y desagrado la derrota que sufrió el Real Madrid hace 20 años contra Boca Juniors en la final intercontinental. Los goles de Palermo, la magia de Riquelme, la solidez defensiva y el sacrificio de un mediocampo que lo dejó todo, fueron algunas de las claves para que el Xeneize se llevará la copa ante el Real Madrid de Vicente Del Bosque.
20 años después Morientes viene a contar las verdaderas razones por la cual el Real Madrid perdió ese partido. “En aquella final Boca nos sorprendió de una manera extraordinaria, porque además de tomarse el partido de una manera mucho más concienzuda, nos hicieron dos goles muy rápido y fue muy difícil de revertir”, explicó el delantero.
Morientes que hizo una de las mejores duplas de ataque junto al ángel de Madrid Raúl González Blanco, continuó su relato: “Pero si analizamos todas las características que tuvo esa final, hay que tener en cuenta que en Japón el ambiente no fue el mismo del que podría haber sido en el Bernabéu o La Bombonera. Eso juega en contra del equipo que va perdiendo, porque si hubiéramos tenido el aliento de nuestro público creo que podría haber sido distinto, más allá de que no se tratara del partido más importante para nosotros”.
Para cerrar las excusas, Morientes concluyó con una chupadita de medias: “Yo he crecido pensando en la lucha entre Boca y River. Hasta el día de hoy la sigo viviendo, como pasó en la final de la Libertadores en Madrid. También recuerdo la vez que enfrenté a Boca y cambié la camiseta con Martín Palermo. Todavía la conservo porque le tengo un gran cariño a él y al club”.
Como todos los jugadores europeos se rinden ante la majestuosidad de la Bombonera, Morientes no es la excepción. El Moro solo tuvo la oportunidad de jugar en la liga de España y Francia, pero nunca tuvo la oportunidad de pisar la bombonera y a sus 44 años ese sueño sigue vigente.