Messi a sus 33 años tiene su mejor campaña en lo que asistencias se refiere pero una temporada más cerca de los mortales en lo que a otros rubro se refiere. El nivel de exigencia del argentino está por las nubes. Tanto que lo que para cualquier futbolista sería hacer un temporadón, en su caso es objeto de críticas.
En un curso en el que el Barcelona es un equipo poco fiable, Messi ha sido la única constante. Brille más o menos sobre el césped, ahí están los números que indican que sin él, el Barcelona no estaría en disposición de pelear los títulos hasta el final, como está ocurriendo esta temporada.
La posibilidad del año en blanco para el Barcelona está sobre la mesa y es mucho más probable que suceda a que puedan ganar la liga o la Champions. Pero sin Messi no existiera esta posibilidad y hace mucho que el Barcelona estuviera jugando por nada.
Más de la mitad de los goles que ha marcado el conjunto azulgrana en esta Liga tienen la intervención decisiva de Leo Messi. Sólo hay tres temporadas en la que el capitán del Barça tuvo más participación en los goles del equipo.
Una de las claves de que haya intervenido en tantos goles esta temporada está en su faceta como asistente. El argentino está firmando la mejor temporada de su carrera en este aspecto, con 21 pases de gol hasta la fecha. Ha superado la marca de Xavi Hernández en un solo curso (20) y está en condiciones de dejar la marca todavía más alta. En dos partidos Messi todavía tiene tiempo de servir en bandeja algún gol.
La Messidependencia es una realidad, el argentino puede estar regalando goles a sus compañeros pero el Barcelona necesita que también los marque para poder ganar algún titulo. Con la liga casi definida los azulgranas apuntan a la Champions donde tendrán que jugar todos sus partidos en Lisboa y Luis Suárez el otro encargado de hacer goles en el equipo no marca fuera de casa en la Champions desde hace mucho años. Messi necesita aumentar su cuota goleadora si el Barcelona quiere levantar algún título esta temporada.