El Barcelona envuelto en problemas los puede olvidar una semana gracias a Ansu Fati, el joven delantero de 17 años y 94 días que en sólo 120 segundos marcó un doblete que le llena de moral como sustituto del lesionado Luis Suárez, una baja que ha dolido bastante pero que a partir de ahora no deben echar de menos.
El Barcelona empezaba el partido ante el Levante a seis puntos del Real Madrid por lo que tenía prohibido fallar. Setién sacó un once con Semedo lateral derecho, Lenglet de central y Rakitic de acompañante de Busquets y De Jong. El juego azulgrana no ha cambiado mucho a el mismo que tenía Valverde como local al frente del equipo. Muchas ocasiones de gol, pero también le siguen llegando con facilidad.
A diferencia del Granada en el partido que sirvió de presentación a Setién, el Levante hizo un planteamiento más atrevido y se iba con alegría al ataque cada vez que podía. Pero el primero en pegar fue el equipo Culé. Messi siempre Messi, primero sirvió un balón desde campo propio para la carrera de Ansu Fati que batió por bajo a Aitor; y dos minutos después repitió pase hacia el hispano-guineano que no falló e hizo el segundo antes de terminar el primer tiempo.
Para el complemento apareció el otro héroe habitual, Ter Stegen evitó que el Levante se metiera en el partido en el inicio de la segunda parte. Roger y Morales hacian temblar al Camp Nou pero el alemán siempre firme y bien parado evitó el gol hasta el minuto 92 cuando Rochina acortó distancias con un gran disparo desde lejos.
El verdadero examen de Setién debe ser fuera del Camp Nou. Tras reprobar en Mestalla, tiene ahora esta semana dos duras pruebas en San Mamés y el Benito Villamarín, donde no jugará Piqué por sanción. Tras estos dos choques es cuando se deben sacar conclusiones.