Dembélé arrancó aplausos del Camp Nou, jugó en la banda derecha y en el minuto 7 ya recibió la primera ovación. Le hizo ¡cinco! recortes a Pedraza, totalmente ridiculizado y superado, para luego centrar el balón que pasaría sin mayor transcendencia. Si a la técnica, velocidad, cambio de ritmo y talento que tiene se le suman disciplina y sacrificio, esta joven estrella se dedicara a acaparar titulares y portadas. Exclusivamente deportivas. Fuera de su desordenada e inmadura vida privada.
El francés fue líder del conjunto culé, el más inspirado, el más incisivo. Suya fue la asistencia a Gerard Piqué en el primer tanto azulgrana. Se asoció bien durante todo el choque y saco el pecho mientras Messi recibía toda la furia de la zaga del Villarreal y Coutinho solo quería cazar pokemones. El brasileño apenas se le vio contra el PSV en la Champions League y este domingo tampoco intervino mucho. Su banda, la izquierda, pasó casi inadvertida. Se le vio más a Jordi Alba que a él en la punta del ataque. No está fino necesita ese Pikachu.
El Barça ganó su compromiso ante el Villarreal (2-0) gracias a los goles de dos jugadores de la casa, Piqué en la primera parte y Aleñá, que se estrenó como goleador en la Liga, ya en la segunda mitad, cuando más sufría el equipo de Ernesto Valverde, que sufrió los primeros pitos al sacar a Vidal del Campo.
La victoria culé los posiciona de nuevo en el liderato de la Liga española con 28 puntos, uno más que su más cercano perseguidor, el Sevilla que luego de su empate con el Alavés suma 27 puntos. El Atlético de Madrid tampoco pudo ganar su encuentro y esta tercero con 25 puntos. El Alavés cierra los puestos de Champions con 24 puntos y un poco más lejos asoma el Real Madrid de Solari que logró una importante victoria ante el Valencia.