31 de octubre ¡Halloween! y los fantasmas decidieron salir en el Barcelona, Malcom y Dembélé estuvieron de terror frente al Cultural Leonesa, ambos son las alternativas con las que cuenta Ernesto Valverde en el banquillo y están obligados a hacer mucho más, especialmente el francés. Y dado el estado actual del conjunto azulgrana con el complicado calendario y a la espera de la recuperación de Messi, es en estos partidos donde deben dar un paso al frente. Reclamar un sitio, reivindicar un papel que ha dado más miedo que la Monja y no es a las defensas contrarias.
Lo mejor del Barcelona fue Jasper Cillessen, sabe que no va a ocupar la portería del Barcelona mientras Ter Stegen no baje el nivel. Pero poco parece importarle al holandés. Ante el Cultural sacó dos manos fundamentales para que el Barcelona no viviera una película de Tarantino luego del recital de Broadway que le dio al Real Madrid.
El partido defensivo de el Cultural fue de la altura de Jigsaw, planificó y ejecutó en orden y con intensidad durante todo el encuentro. El Barcelona nunca pudo salir del juego del miedo durante 90 minutos y apenas al 71´ pudo conseguir su primer tiro a puerta, no encontró la manera de provocar desajustes en el balance defensivo del conjunto de leonés.
Lo que más ha necesitado el Barcelona las últimas temporadas fue lo que los salvo de la pesadilla, un tercer central de garantías. Clement Lenglet va más alla. Decidió el partido con un gol de cabeza en tiempo de descuento. Umtiti puede tomarse su recuperación con calma, Clement gana partidos.
La victoria del Barcelona fue mucho premio para lo que ofrecieron y más que en un partido de copa donde los suplentes tienen la oportunidad para mostrarse y ofrecerles variantes a Valverde para partidos importantes, estos prefirieron pasar el partido pensando en sus disfraces de Hallowen. La falta de dominio y profundidad se tradujo en una inoperancia ofensiva tan llamativa que el meta de la Cultural vivió un partido relajado recibiendo solo 2 disparos a puerta.