El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, apareció en la sala de prensa del estadio de Los Cármenes con una gran sonrisa. Luego de la victoria en Granada que lo hace estar a solo un paso de la Liga, aunque sigue sin querer contar los pollos antes de nacer. El francés, eso sí, admitió que gritó de alegría al acabar el partido. La Liga ya se ve muy cerca.
El partido se dividió el dominio claramente el primer tiempo para el Real Madrid y el segundo tiempo para el Granada y obviamente la primera pregunta en la sala de prensa fue acerca de ese flojo segundo tiempo blanco: “Hicimos una muy buena primera parte, impresionante con la posesión del balón. La segunda fue peor pero es que el rival juega. Para hacer cosas con esta Liga hay que sufrir un poco y aguantamos como equipo. Hay que estar orgulloso del equipo” Dijo Zidane.
Por el grito del final de partido también le preguntaron y entre risas Zidane respondió: “Grité porque estaba contento y porque en el fútbol se sufre. Es normal gritar porque eran tres puntos muy importantes. Grité para decirle a mis jugadores que habían hecho un partido impresionante. Me alegro por ellos”.
Para cerrar la rueda de prensa a Zidane se le preguntó por varios de sus jugadores pero llama la atención en especial lo que dijo de Bale. El Galés lleva dos partidos seguidos desde el banco marcándose unos momentazos, primero utilizando el tapaboca como antifaz para echar una dormidita en pleno partido y ahora en Granada se ha dedicado a hacer que sigue el partido con unos binoculares, usando un papel higiénico en una de las manos. Toda la prensa estaba indignada con esto pero Zidane no le dio bola: “No tengo queja de Bale. Estamos aquí y faltan dos partidos”.