Cristiano Ronaldo, superados los 30 años, se confirmó como un finalizador. Entre todas las etiquetas que existen y se amoldan a su perfil, es la de ‘finalizador’ o ‘definidor’ la que más se adapta a su figura sobre el campo.
Las razones, principalmente, han sido dos: la relación ‘cantidad-calidad’ de recursos para marcar goles, en primera instancia, y las constantes pérdidas y/o malas decisiones al participar en gestación. Sí, el “viejo” Cristiano Ronaldo es cada vez menos útil allí.
Pero sin declararse como un “9” aún, sino más una mutación de extremo izquierdo, son muchas las ocasiones en las que su defecto sale a relucir.
Y eso, por el bien personal e incluso colectivo, debe cambiar.
“Más cerca del área y más lejos de la jugada”
Los años no pasan en vano ni siquiera para el tipo que espantó a Patrice Evra de su casa a través de dieta, entrenamientos y ejercicios. Los “peros” se hacen cada vez más visibles, y es la reinvención aquella que los mantiene o no en la élite. Esa es la receta; la clave.
Cristiano, de hecho, ya se ha reinventado. Sus últimos años en Madrid y los primeros en Turín, han evidenciado un cambio con respecto a su figura más joven: más enfocado en la finalización (desde las cercanías del área) que desde las participaciones por banda.
Sin embargo, es hora de dar el siguiente paso. Un Cristiano aún más del área y menos del juego.
La idea no es negarle la participación al gestar, sino ocultar los defectos que encuentra allí (dribles negativos, pérdidas por malos controles, remates bloqueados…) y potenciar sus virtudes.
¿Quién no quiere un Cristiano Ronaldo igual (¡o más!) goleador en los próximos años?
El portugués debe socializar más con el área y, a su vez, seleccionar mejor sus participaciones. En el fútbol, menos es más; se considerada más valiosa una gran intervención que 10 negativas o del promedio.
Es hora de ser un “9” a tiempo completo y no solo de destellos o goles.
No debiese ser una tarea difícil para Cristiano: las cifras de goles (el pilar más importante de su juego) aumentarán, el colectivo se verá potenciado y sus años en la élite se alargarán.