Mestalla es uno de los estadios más difícil de la liga este año poco son los equipos que consiguen puntuar y los colchoneros lo han conseguido. Un punto que da buenas sensaciones de cara a la Champions League pero al mismo tiempo trae preocupaciones a los rojiblancos.
El partido fue intenso, de esa intensidad que llevó al Atlético de Madrid a 2 finales de Champions. Marcos Llorente abrió el marcador para los capitalinos a los 15 minutos de partido. El equipo local logró la igualdad gracias al gol de Gabriel Paulista en el minuto 40 tras un córner. No obstante, el conjunto atlético se puso por delante con un tanto de Thomas Partey cerca de la conclusión de la primera mitad, en el 43, 2-1 al descanso.
La alegría del Cholo era evidente por los goles de sus mediocampistas y la intensidad con la que estaban jugando, pero en la segunda mitad esa alegría cambiaría por preocupaciones.
La defensa a balón parado del Atlético es un pudin, ya lo había visto el Valencia en el primera mitad con el gol de Paulista y en el segundo tiempo aprovechó un tiro libre para empatar el encuentro. Geoffrey Kondogbia a los 59 minutos le ganó la pulseada a Marcos Llorente para poner cifras definitivas al encuentro. 2-2.
El Atlético de Madrid ya ha encajado nueve goles entre Liga y Champions a balón parado, el 45% del total. Lo que era su principal arma de ataque ahora lo están sufriendo en contra.
En otras temporadas cuando el Atlético se ponía por delante en el marcador el rival de turno se podía dar por liquidado. No había manera de romper el planteamiento defensivo rojiblanco que formaba un escudo protector impenetrable alrededor de la portería de Jan Oblak. Eso esta temporada se perdió y con el Liverpool tan cerca, al Cholo le queda poco para recuperarla.