El regreso de la liga está a la vuelta de la esquina y Zidane cuenta con todos sus jugadores para hacerle cara a las 11 finales que tiene enfrente. Es posible que haya cosas que cambie respecto al Real Madrid de antes del parón que no le hace gol ni al arco del triunfo, al nuevo Real Madrid que en el papel debería ser unos de los más goleadores de Europa.
Zidane tiene clara la portería y en la defensa solo tiene la duda de Marcelo su amor eterno o Mendy su joven compatriota que hace todo bien, un debate que le ha acompañado toda la temporada y que los fanáticos también han tomado parte silvando al brasileño. En el centro del campo tampoco habrá ninguna duda de que Casemiro, Valverde, Kroos, Modric e Isco serán sus hombres de referencia. El problema ¾ para arriba, con 10 delanteros y diferentes situaciones.
Benzema es la referencia ofensiva, titularisimo y el único delantero que ahora mismo le inspira total confianza al técnico blanco. Mariano y Jovic están relegados al banco sin tener muchas oportunidades.
En los extremos se le complica la decisión. Hazard y Asensio ya están recuperados y se entrenan con el equipo, apuntando a ser titulares del nuevo equipo. Bale sigue siendo propiedad del Real Madrid y aunque tenga 2 años sin jugar en serio, su calidad no se discute.
Por otra parte Zidane tiene muchos jóvenes comodines que piden a gritos oportunidades, han entrenado durante todo el año y su rendimiento ha sido muy bueno, hablamos de Vinicius, Rodrygo y Lucas Vázques. Incluyendo a Brahim Díaz y a James Rodríguez el Madrid tiene suficientes delanteros para hacer 3 equipos de calidad.
Lo que hace mucho más difícil la tarea de Zidane al elegir delanteros para un equipo que ha tenido problemas con el gol durante toda la temporada.