¿Acaso la carrera de Miguel Almirón puede ser más promisoria?
Si la mitad de los jugadores de fútbol tomasen tantas buenas decisiones como el paraguayo, este deporte fuese mucho más competitivo y atractivo. En especial para los sudamericanos.
Un paso por Lanús donde fue figura, se formó y pudo aspirar a algo mejor.
Almirón, tras Argentina, llegó a los Estados Unidos. El flamante proyecto del Atlanta United apostaba por un joven zurdo que daría mucho de qué hablar.
Las cosas no salieron como se esperaban. Salieron mejor.
Tras dos temporadas brillando a la par de Josef Martínez y conquistando cada rincón de Norteamérica, llegó la hora de marchar.
El otro se quedó viviendo la buena vida, no se culpa.
Almirón va en búsqueda de triunfar en la élite, porque sabe que tiene material para alcanzar lo que se proponga en esto del fútbol.
El Newcastle tocó la puerta, el paraguayo aceptó el llamado.
Entonces, Miguel Almirón será nuevo jugador de las “urracas”. Donde tendrá la misma misión que tuvo en Atlanta, pero en un contexto distinto: potenciar a un venezolano para que marque goles.
Muchas cosas cambiarán. Y desde aquí esperamos que su rendimiento no sea una de ellas.
El equipo de Rafa Benítez no atraviesa una crisis, pero tampoco pasa un momento dulce. La incertidumbre que transmiten los dueños del club se ve reflejada en el rendimiento del equipo.
A veces lo hacen muy bien, otras parece que deberían jugar en la League One.
Que en invierno llegue un fichaje de esta envergadura, habla de lo que podría ser el cierre de temporada en el Newcastle.
Un regalo de navidad tardío, pero muy útil.
Desde el día uno, Almirón tendrá responsabilidades. Es así cuando llegas a un equipo necesitado y en medio de la mejor liga del mundo.
Este es el nuevo nivel del fútbol, donde muchos fracasan.
¿Estás listo, Miguel?